Todos piensan que ser un emprendedor es fácil, pero no se dan cuenta de los miles de retos que deben enfrentar para alcanzar el éxito.
Muchas veces escuchamos a los emprendedores decir que tener su propio negocio es lo más importante que han hecho, que de alguna forma satisface su espíritu independiente. Después de cuatro años de tener mi propia empresa, estoy de acuerdo con esa afirmación. No hay nada más satisfactorio que ver cómo una idea cobra vida bajo tu liderazgo, después de dedicarle todo para cumplir la misión.
El trabajo es indudablemente especial, pero parte de lo que lo hace tan increíble es el camino difícil que todo dueño de negocios debe recorrer para triunfar. Como un emprendedor entrando al competido mundo de la publicidad, estoy orgulloso de lo que he logrado, pero no ha sido exactamente fácil. A veces deseo que hubiera habido alguien que me advirtiera sobre los aspectos decepcionantes de ser tu propio jefe. Dicho eso, si ya te vas a atrever a emprender, aquí están tus advertencias.
1. Nunca dejas de trabajar. El éxito o el fracaso del negocio descansa en tus hombros. Eres el que toma las decisiones y la cara de la empresa. La cena con la familia o las cervezas con los amigos pueden convertirse en entrevistas para ponerse al corriente.
No fue sino hasta unas vacaciones (forzadas), que me di cuenta que había estado trabajando sin pausa durante cuatro años seguidos. Tu esfuerzo es la única cosa de la que tienes el 100 por ciento del control y no querrás que tu negocio fracase porque no das tu todo.
2. A veces es muy solitario. Para comenzar y esperar a tener éxito en la industria, necesitas empuje y pasión. Te encuentras con retos y problemas que la mayoría de tu círculo interno no entendería, así que te dejan sin una salida. Encuentra una forma de procesar y reflejar. Busca una manera de reflexionar sobre cada día – escribir en un diario funciona para mí.
3. Cometes errores. Debes dejar tu ego en la puerta. Como tomador de decisiones de una startup, las circunstancias te retan constantemente. Debido a que tu equipo y socios ven que tú tomas las decisiones importantes, no puedes dejar que el miedo de estar equivocado te quite lo necesario para ser el líder. La indecisión puede ser la peor elección de todas, así que ten confianza cuando el equipo avance.
4. El progreso puede ser muy lento. La mayoría de la gente ve al emprendedor en línea final: sujetando su trofeo. Lo que no ven son las horas de trabajo y los incontables intentos que le tomó llegar ahí. Es muy importante no acelerar el producto o acelerar el proceso. Recuerda, toma mucho coraje comenzar una empresa y la misma persistencia seguir. Pero si creces con cada experiencia y tienes el enfoque para alcanzar tus metas, el trofeo es mucho más importante.
5. Los forasteros no entenderán. La mayoría de las startups están intentando ya sea crear algo que no se haya hecho antes o mejorar enormemente algo ya establecido. Para los otros, esa idea es tan extraña que no pueden verla hecha realidad. Cree en tu misión y haz a un lado a la gente negativa.
Para un emprendedor que está comenzando por primera vez, hay muchos obstáculos para los que debe prepararse. Te enfrentarás a algunos retos diarios, y es importante saber que habrá tiempos difíciles. Sin embargo, si realmente crees en ti mismo, el negocio y tu equipo, aprovecharás la oportunidad. Tómalo de mí, dirigir una startup puede ser la decisión más importante que hayas tomado.
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