Como emprendedores hay veces en las que sentimos que cargamos con todo el peso de la responsabilidad y que somos los encargados de realizar o supervisar todo lo que ocurre en nuestra empresa.

Pero, ¿qué pasa cuando el emprendedor no sabe hacia dónde dirigirse exactamente o desconoce cómo abordar ciertas problemáticas de importancia estratégica para el negocio?

Es muy probable que si estás leyendo esto es porque en algún momento has sentido esa necesidad de contar con un guía que te acompañe durante esos momentos críticos para la vida de tu negocio.

Aunque es muy difícil asegurar que tan bueno será o no el seguir un consejo, el tener un mentor con el que podamos platicar sobre nuestras preocupaciones y que nos pueda nutrir con sus experiencias en situaciones similares nos brindará, seguramente, mayores posibilidades de éxito y principalmente mayor tranquilidad y seguridad a la hora de tomar la decisión final para resolver algún problema.

El mentoring es un proceso, hoy día es implementado a diferentes niveles por muchas empresas multinacionales como el caso de Nestlé y General Electric, que ha demostrado su valor para desarrollar el talento profesional de las personas al compartir varias horas a la semana con un mentor que reúne ciertas características y experiencias que puede compartir como vía de aprendizaje y reflexión para los menos experimentados.

Esto comprende una herramienta sumamente importante para el desarrollo personal y profesional de los talentos jóvenes en las empresas.

En el caso de los emprendedores el proceso es similar. Luego de reconocer que un mentor te será muy útil para mejorar tus resultados empresariales, el siguiente paso es el conseguir a la persona adecuada para convertirse en esa guía.

En este aspecto no existe una receta perfecta para elegir al mejor candidato, lo que es un hecho es que debes de asegurarte que esa persona tiene amplia experiencia en el tema en el que te interesa trabajar.

No es de extrañarse que muchos emprendedores exitosos han contado con el apoyo de más de un mentor, con lo que han podido fortalecerse desde distintas perspectivas tanto en lo personal como en lo profesional.

No tengas miedo de intentar acercarte incluso a empresarios muy exitosos que admires, anímate a contactarlos a través de alguna red social o email. Te sorprendería saber que muchos de ellos están dispuestos a dedicar algunas horas de su tiempo para desarrollar a otros empresarios.

Sin embargo, no necesariamente debes acudir a este tipo de gurús para asegurar un resultado sobresaliente. Es posible que a través de ciertas incubadoras de empresas o fundaciones puedas acercarte a un mentor que te apoye con el desarrollo de tu negocio.

Fuente

http://entm.ag/25F3eNM